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El dolor nunca es obra del acaso, nunca es injusto en verdad. Dolores tenidos como injustos solo son considerados así porque nos falta la visión de las verdaderas causas.
Esa visión fue siendo substraída de la humanidad paulatinamente, al largo de milenios, a medida que ella se alejaba cada vez más del modo correcto de vida, preconizado por leyes universales (http://on.fb.me/1MkBS4L) y reiteradamente enseñado y exhortado por varios Precursores y profetas de los tiempos antiguos. Y así acabamos tornándonos ciegos y miopes espirituales.
Y es justamente esa visión corta que nos impide hoy de reconocer el alcance y el significado del Amor por detrás de los efectos recíprocos dolorosos que nos alcanzan una vez y otra, en nuestra peregrinación por las materialidades. Dolores que, en última instancia, sirven para conservarnos vivos espiritualmente, independientemente de la creencia de cada uno. “[El Señor] corrige el hombre con dolores en su lecho, para impedir que su alma caiga en la fosa, y su vida de cruzar el canal de la muerte” (Job33:19,18).
Podríamos hacer una analogía de eso con una situación bastante común del día a día, cuando se va a hacer uso de un automóvil. Al abrir la puerta, una mariposa o cualquier otro insecto volador entra en el auto y comienza a golpearse en el vidrio del frente. La persona que está en el vehículo busca ayudar la mariposa a escapar de ahí, dándole pequeños golpes con la mano. Para la mariposa, sin embargo, la situación es desesperadora: ¡además de estar presa en algo que no ve, aún existe alguna cosa tratando de golpearla por detrás! Ella no sabe que aquellos golpes están, en verdad, auxiliándola, para que reencuentre el camino de la libertad perdida.
De manera semejante ocurre con el ser humano que por voluntad propia quedó preso en las telas invisibles de los falsos caminos, más que, aun así, se muestra merecedor de auxilio, debido a los esfuerzos sinceros en querer seguir los preceptos de su Creador. Recibirá su ayuda con toda seguridad, poco importando la forma como eso se da, si le causa o no algún dolor momentáneo.
(Conozca las obras literarias publicadas por la “Ordem do Graal na Terra”. Ingrese a: http://bit.ly/1XjNebF.)
