less than 1 minute Pretender pasar por penurias o soportar dolores físicos, a cambio de la realización de algún deseo, es algo absolutamente indigno de un ser humano que desea evolucionar espiritualmente. Si una persona siente, en su alma, el impulso de hacer una promesa a su Dios, entonces debe prometer, básicamente, esforzarse en mejorar en todo, buscando mantener su voluntad interior siempre pura, cuidando también de sus palabras, pensamientos y acciones. Debe prometer y cumplir, porque solo así su promesa tendrá valor, y solamente así podrá también cosechar buenos frutos en la ley de la Continue→