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En su libro “La Gran Pirámide Revela Su Secreto” (http://bit.ly/1kUmRFw), Roselis vo Sass informa que la Pirámide originariamente era revestida de bloques de mármol reluciente, de color amarillo oscuro. Veinte cinco mil bloques fueron destinados a ese revestimiento, denominados por los investigadores de “prismas ópticos de 16 toneladas”. La esfinge, por su lado, era lisa y presentaba un vislumbre rojizo.
La belleza original de las dos edificaciones sucumbió… a la acción de vándalos y saqueadores a lo largo de milenios, y también a los efectos de los propios milenios. El significado principal de ambas, sin embargo, no se perdió. La esfinge indica que la Pirámide encierra un enigma que debe ser descifrado. Tal enigma se compone de grandes eventos espirituales y la época en que ocurrirían.
Lo más crucial de esos eventos dice respecto al Juicio Final y su desencadenamiento. Ese periodo es representado por la Cámara del Rey, o Sala del Juicio, la cual contiene un sarcófago sin tapa. Roselis von Sass aclara el significado del sarcófago al transcribir las palabras de un gran sabio de la época:
“— La pirámide que ahora será construida en el país de los egipcios no está destinada a guardar la viva llama de la vida, fue lo que el gran espíritu nos explicó. En ella, como sabéis, será colocada la señal de la muerte. Es un gran sarcófago de granito rojo, y ese sarcófago no tendrá tapa, pues en él nunca será colocado un difunto. ¡Deberá ser colocado en un recinto que se llamará Sala del Juicio! El significado del sarcófago abierto permaneció durante mucho tiempo un enigma para nosotros. Hasta que el gran espíritu apareció de nuevo, aclarándonos ese significado. Él dijo: ‘La Tierra estará poblada por muertos cuando el Juez del Universo, el Señor de la Pirámide, venga. El sarcófago es el símbolo de la muerte en la Tierra. Él está en la Sala del Juicio. Cuando llegue la hora del gran Juzgamiento, la mayoría de los seres humanos se habrá alejado tanto de la Luz y de la vida, que apenas la muerte inevitable los aguardará’.”
La muerte evocada por el sarcófago sin tapa no es, sin embargo, la muerte terrena, y si la espiritual, la llamada “segunda muerte” en la Biblia (Ap.20:14; 21:8). El tiempo del Juicio es la época que ahora atravesamos (http://on.fb.me/1dSlfiQ). Los acontecimientos progresivos del tiempo del Juicio deben servir de exhortaciones, de graves avisos, de contundentes alertas para las personas vivas en el espíritu, para que se muevan espiritualmente de tal forma que puedan subsistir al Juzgamiento.
Solo aquel que se esfuerza en pautar su vida entera en conformidad con lo que disponen las leyes de la Creación (http://on.fb.me/1MkBS4L), ya explicadas por el Hijo de Dios por medio de parábolas, podrá tornarse apto a transponer el Juicio de Dios, del cual estamos vivenciando la última fase. La decisión está en las manos de cada uno de los que aún portan una centella de Verdad a encandecer sus almas.
(Conozca las obras literarias publicadas por la “Ordem do Graal na Terra”. Ingrese a: http://bit.ly/1XjNebF.)