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less than 1 minute No siempre una buena intención es reconocida de inmediato y valorizada como tal. A veces es necesario esperar que las intemperies de la vida laven primero el ambiente y desobstruyan la visión.
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less than 1 minute Vencer el orgullo y extender la mano primeramente después de un malentendido no es señal de debilidad. Al contrario, es una indicación de nobleza y firmeza de carácter.
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less than 1 minute Valor existe en dar siempre lo mejor de sí en la realización de un trabajo, independientemente del porte de la platea y de eventuales reconocimientos.
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less than 1 minute Las cosas bonitas que una persona íntegra esparce por donde pasa, a través de palabras constructivas, pensamientos puros e intuiciones límpidas (http://bit.ly/1WgQabz), no son acaso perdidas; por el contrario, ellas continúan atrayendo más y más cosas igualmente buenas y bellas, reforzándolas y condensándolas. Por fin, toda esa belleza unida sigue adelante, diseminando nuevos auxilios y bendiciones donde encuentre suelo fértil para germinar, en locales diversos y en tiempos variados.
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less than 1 minute En la vida, una situación de aparente estabilidad y tranquilidad puede desaparecer en un instante. Solo la permanente vigilancia espiritual, aliada a una inquebrantable voluntad para el bien, concede auxilio y protección a quien se ve súbitamente envuelto por el torbellino de las ondas de la reciprocidad (http://bit.ly/1O8Ttzg), que se abaten ahora sobre el mundo entero.
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less than 1 minute Flexibilidad no es debilidad, pero sí sabiduría. El flexible siempre consigue ajustarse en tiempo correcto a una dada situación, y aprende rápidamente con ella. Ya el rígido, como el propio nombre lo dice, se mantiene endurecido en su posición, y por eso acaba frecuentemente hiriéndose, a veces con bastante gravedad. Son los casos en que él tiene que vivenciar como su orgullo (http://bit.ly/2dmqZRX) y vanidad (http://bit.ly/1T4oJ1c) son quebrados implacablemente por los vientos de la reciprocidad, cuando solo entonces podrá retomar la trayectoria ascendiente de la evolución de su espíritu.