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less than 1 minute Es muy bueno nutrir esperanzas factibles por cosas buenas, pues ellas nos permiten ampliar la visión y vislumbrar un futuro radioso más adelante. Sin embargo, también es necesario que mantengamos siempre un equilibrio sereno entre ellas, examinándolas cuidadosamente, para que no nos suceda de caer en una gran decepción caso alguna de ellas se muestre como una fantasía inexiquible. El Día Sin Mañana