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less than 1 minute Si la voluntad intuitiva es pura, entonces los pensamientos resultantes de ahí serán igualmente puros. Y pensamientos de esa especie, generados y fortalecidos en la pureza interior, son capaces de actuar en un ámbito muy amplio, concediendo fuerza y auxilio donde encuentren almas que también anhelen por la pureza. Es la ley del equilibrio en acción, el dar y el recibir en su forma más noble, en su conformación más pura.