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Astro único en su género es esta Estrella del Juicio, o Estrella Radiante. “Estrella” no en el sentido puramente astronómico, pero sí, debido a su colosal poder y magnitud. Se trata de un objeto cósmico extraordinario, una especie de cometa gigante, absolutamente descomunal. Es el Gran Cometa, la profetizada Estrella del Juicio. Del Juicio, porque desencadenará los últimos y grandes efectos, materialmente visibles y sensibles, del proceso del Juicio Final ora en curso en la Tierra.
Anticipando futuras concepciones erradas, y ya corrigiendo las falsas que ya vienen surgiendo, aclaremos primeramente lo que ese astro no es:
- No es una señal del retorno de Jesús. La promesa de la segunda venida del Hijo de Dios posee un significado y una realización muy diferente de lo que es imaginado y esperado por la mayoría de los fieles cristianos.
- No es un tipo de nave espacial y no tiene ninguna relación con discos voladores.
- No es un objeto succionador de almas degeneradas y tampoco va a llevarlas para otro planeta cualquiera.
- No es habitado por ninguna raza alienígena.
- No es un cometa con una órbita establecida de millares de años alrededor del Sol.
El Gran Cometa es un astro enviado por una voluntad superior, proveniente de un plano muy encima de nuestro mundo material. Al penetrar en nuestro universo de materia física, él se viste automáticamente con un envoltorio de la misma especie de materia, tornándose así visible a los ojos terrenos.
Ese astro provocará profundas alteraciones en el relevo del planeta y catástrofes indescriptibles, como parte del proceso global de purificación previsto. Sin embargo, su influencia ya se hizo bien perceptible en la Tierra en los últimos tiempos, evidenciada por el aumento continuo de catástrofes y de las alteraciones climáticas, tanto en número como en intensidad. Cuando esté plenamente visible en el cielo, entonces será la señal de que el tiempo concedido para la redención de la humanidad expiró finalmente.
La Estrella del Juicio constituirá así el último, absolutamente el último llamado para que las criaturas humanas, aún vivas en sí, modifiquen inmediatamente su modo de ser y pasen a vivir en irrestricta conformidad con las leyes que gobiernan la Creación. Pues solamente de ese modo será posible “nacer de nuevo” aún en tiempo, tal como exigido por el Hijo de Dios. Y solamente el ser humano renacido en sí mismo estará apto a subsistir ahora en la última fase del Juicio Final.
(Conozca la literatura del Grial publicada por la Ordem do Graal na Terra. Ingrese a: http://bit.ly/1XjNebF.)
